Cobra vigencia lucha contra la pobreza, puntualiza Enrique Priego
Villahermosa, Tab., 5 de
abril de 2019.
No.- 042.
Cobra
vigencia lucha
por
los más necesitados
·
El
gobernador Adán Augusto López Hernández encabezó ceremonia conmemorativa del
centésimo aniversario de la promulgación de la Constitución Política de Tabasco
·
El
titular del Poder Judicial, Enrique Priego Oropeza, puntualizó que se trabaja
para frenar avance de la pobreza y mejorar condiciones de los tabasqueños
A cien años de la
promulgación de la Constitución Política de Tabasco, el presidente del Poder
Judicial, Enrique Priego Oropeza, puntualizó que los gobiernos de Andrés Manuel
López Obrador y Adán Augusto López Hernández mantienen el compromiso de luchar
contra la pobreza, y dar cumplimiento a los principios que nos legaron los
constituyentes mexicanos de 1917 y los tabasqueños que redactaron la Carta
Magna local dos años más tarde, en 1919.
En
plaza de armas, el magistrado Oropeza aseveró que en Tabasco la lucha por el
bien de los más necesitados no sólo está vigente, sino que está más fuerte cada
día.
Al fungir como orador oficial a nombre de los tres poderes
de la entidad en la ceremonia cívica conmemorativa del centésimo aniversario de
la promulgación de la Constitución tabasqueña, el magistrado Priego Oropeza
observó que ya no existen tiendas de raya ni servidumbre, pero hay una deuda
con el freno a la pobreza y la mejora en las condiciones sociales de los
habitantes de la entidad.
Ante el gobernador Adán Augusto López Hernández, el
presidente de la mesa directiva del Congreso local, Tomás Brito Lara, y la
vicepresidente de la mesa directiva del Senado de la República, Mónica
Fernández Balboa, Priego Oropeza resaltó el trabajo diario que se efectúa en la
Nación y la entidad para cumplir con los principios legados por quienes
redactaron las constituciones de México en 1917 y Tabasco en 1919.
Asimismo, rindió un homenaje a los 15 ilustres legisladores
que elaboraron la Constitución local que hoy ajusta cien años y cuyas rúbricas
aparecen en el documento original, entre ellos, Rafael Martínez de Escobar,
entonces
presidente del Congreso; Francisco J. Santamaría, quien llegara a ser
gobernador de la entidad, Federico Martínez de Escobar, y Fernando Aguirre
Colorado.
Frente
a lo que fuera el cuartel denominado El principal, el último bastión de la
intervención francesa que capituló el 27 de febrero de 1864, el titular del
Tribunal Superior de Justicia y del Consejo de la Judicatura subrayó el valor
de la obra jurídica y política que este grupo de diputados legó al pueblo
tabasqueño.
Poco después de que los elementos del trigésimo séptimo
Batallón de Infantería rindieran los honores a la enseña nacional, el orador
oficial sostuvo que la vida en sociedad es una lucha constante, y por ello
desde la Antigüedad, con la cultura griega, los pueblos civilizados que
aspiraban a convertirse en Estados de derecho requerían de una Constitución
para limitar y encauzar la función de las autoridades y garantizar la vigencia
de los derechos humanos.
Y como ejemplo del avance en la legislación, dio lectura a
artículos que prohibieron en Tabasco las tiendas de raya, liberaron a los
campesinos de sus deudas por concepto de servidumbre, y eliminaron la
capitación, esto es, el sistema injusto de impuestos por persona, independientemente
de su renta o de sus propiedades.
Sin
embargo, dijo que aunque a cien años de distancia ya no se sabe de
servidumbres, sí hace falta que se continúe la obra para que las trabajadoras
domésticas reciban los beneficios del Instituto Mexicano del Seguro Social
(IMSS).
En la ceremonia en la que las fuerzas armadas estuvieron
representadas por Pedro Escalera Cobián, comandante de la Trigésima Zona
Militar, el titular del Poder Judicial destacó que la Constitución del estado
constituye la norma suprema en el orden jurídico interno de Tabasco.
Por ello, todas las leyes que apruebe el Congreso estatal,
los reglamentos que dicte el titular del Poder Ejecutivo o los ayuntamientos,
además de las normas individualizadas, resoluciones y sentencias emitidas por
los tribunales y jueces del estado deben sujetarse a lo dispuesto por el máximo
orden, salvo cuando éste contravenga a la Constitución federal.
Enrique
Priego advirtió que un pueblo sin raíces carece de cimientos para desarrollarse
y proyectarse hacia futuro, y puntualizó que nuestra entidad posee raíces
históricas, experiencias sabias y heroicas, así como un pueblo capaz de
aprovechar lo bueno del pasado y desechar lo que impide su camino al bienestar.
Al evento acudieron magistrados del Tribunal Superior de
Justicia y consejeros de la Judicatura, además de los secretarios de Gobierno,
Marcos Rosendo Medina Filigrana; de Educación, Guillermo Narváez Osorio, y de
Cultura, Yolanda Osuna Huerta, entre otros.
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