Hoy más que nunca, es esencial la capacitación
Villahermosa, Tab., 1 de octubre de 2019. No.- 124.
Hoy más que nunca,
es esencial la capacitación
· Eduardo Alberto Osorio Rosado, juez de distrito en materia mercantil federal, dicta conferencia Control de constitucionalidad y convencionalidad difusos y concentrados
· Jueces tabasqueños son muy proactivos, manejan perfectamente control de constitucionalidad y convencionalidad en sus resoluciones, afirma el especialista
Ante la magnitud de los problemas medioambientales y sociales que enfrentamos, hoy más que nunca los jueces debemos estar ocupados en la capacitación en materia de derechos humanos y respeto al orden constitucional, puntualizó Eduardo Alberto Osorio Rosado, juez de distrito en materia mercantil federal del décimo circuito, al disertar la conferencia Control de constitucionalidad y convencionalidad difusos y concentrados, y destacar la calidad y preparación de los juzgadores del Tribunal Superior de Justicia (TSJ).
“El juez local sí aplica control de constitucionalidad y convencionalidad. De hecho, aquí en Tabasco hay jueces que han sido mis maestros. Hay un grupo de jueces muy proactivos, que atienden las materias familiar, civil, mercantil y penal, que son maestros e instructores de control de constitucionalidad y derechos humanos, los cuales manejan en sus resoluciones perfectamente”, apuntó.
Con 18 años de experiencia en el Poder Judicial de la Federación, luego de que egresó de la licenciatura en Derecho de la Universidad de Yucatán, el juez de origen tabasqueño indicó que sus homólogos deben tener conciencia de la magnitud de los problemas que se presentan para prepararse más y resolverlos de manera efectiva.
Sostuvo que los juzgadores constituyen un factor de equilibrio y armonía social con el compromiso de restablecer la armonía entre la sociedad y por tanto, “tenemos que tomar conciencia de esa importancia y hacer las cosas como requiere la sociedad”.
Invitado por la Unidad de Igualdad de Género y Derechos Humanos del tribunal tabasqueño, en entrevista Osorio Rosado se refirió a los problemas ambientales y las necesidades de las nuevas generaciones que han planteado líderes como Greta Thunberg.
El especialista agregó que los conflictos de todo tipo que incidan en los derechos humanos en primera instancia entran al terreno de los jueces, quienes a través de sus sentencias están haciendo efectivos los derechos inmanentes al ser humano, lo que implica mayor compromiso con la profesionalización y el cambio en la mentalidad.
Antes los catedráticos de Derecho enseñaban que debía privilegiarse a la ley antes que la jurisprudencia de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) a la hora de emitir una resolución. Ahora el orden se ha invertido y además debe tomarse en cuenta la jurisprudencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CoIDH), que en la actualidad establecen el Derecho, y determinan la amplitud y extensión de los derechos humanos y cuáles son los límites del Estado en la actuación frente a esos derechos, detalló.
Por ello, recomendó a los juzgadores que profundicen en su profesionalización y capacitación y continúen siendo innovadores para mantenerse a la vanguardia con sus resoluciones. Observó que deberán echar mano de herramientas como el control de constitucionalidad, a través del test de proporcionalidad, escrutinio e interpretación conforme.
Advirtió a los juzgadores que a diferencia de lo que plantea We we, la de canción original de Angelique Kidjo, en el sentido que “era normal
que gobiernen los demás”, y dejarle la responsabilidad a otras instancias de aplicar convencionalidad y control de constitucionalidad, con las resoluciones de la Suprema Corte de Justicia de la Nación ya no es así.
“Lo digo como ejemplo. Porque si nos tranquilizaba un poco no manejar estos temas a fondo, porque finalmente había otro tribunal de otra instancia que en amparo podía ejercer este control, la situación cambió. Los tribunales colegiados y los juzgados de distrito ahora están limitados a ejercer ese control, lo ha dicho la Corte, solamente respecto de leyes de su competencia, como es la Ley de Amparo, la Ley Orgánica del Poder Judicial de la Federación y el Código Federal de Procedimientos Civiles.
“Esto significa que sobre las normas de los procesos civil, mercantil y penal no puede ejercer ese tipo de control. Y si no lo pueden ejercer estos tribunales los jueces procesales, los jueces del fuero común, los jueces federales que vemos proceso estamos obligados para hacerlo. ¿Para qué? Para hacer efectivos los derechos humanos de las personas que están involucradas en los procesos judiciales”, manifestó.
Comentó que en la actualidad se registran conflictos de mayor complejidad, por ejemplo, de tensión o colisión entre derechos humanos o principios que no se resuelven con métodos antiguos aprendidos en la licenciatura, sino que se hace solamente mediante ponderación. O se presentan problemas de conflicto entre las leyes o actos con el orden internacional y éstos se resuelven ejerciendo el control de constitucionalidad y convencionalidad por medio del escrutinio, el test de proporcionalidad o la, interpretación conforme, dijo.
Cobra relevancia actividad jurisdiccional
Eduardo Alberto Osorio tiene en su haber una amplia hoja de servicios a lo largo de 18 años de labores en el Poder Judicial de la Federación. Ha sido oficial, secretario en juzgados de distrito y tribunales de circuito.
Al concluir su licenciatura en Mérida, Yucatán, partió a estudiar una especialidad del Poder Judicial de la Federación en la Ciudad de México e inmediatamente comenzó a trabajar como secretario en un juzgado de distrito en Coatzacoalcos.
Posteriormente trabajó en la capital yucateca en un tribunal colegiado; en Acapulco, Guerrero lo hizo en un tribunal colegiado en materia administrativa y penal; en Tuxtla Gutiérrez, Chiapas laboró en el quinto juzgado de distrito, para luego regresar al juzgado tercero de distrito y al tribunal colegiado en materia penal y administrativa en Mérida.
En Yucatán presentó un examen especializado para jueces del nuevo sistema de justicia penal, el cual aprobó en 2015, y en febrero de 2016 fue designado juez del Centro de Justicia Penal Federal en Tabasco. Dos años y medio después el Consejo de la Judicatura lo nombró titular del juzgado primero de distrito y en noviembre de 2018 fue el encargado de abrir el juzgado de distrito en materia mercantil federal en Villahermosa, en el cual conoce de juicios orales mercantiles, ejecutivos orales, así como juicios del sistema escrito.
Ante estudiantes de la licenciatura en Derecho de la Universidad Alfa y Omega, jueces civiles, penales, mixtos y de paz y personal de la Fiscalía General del Estado, aseveró que como nunca antes la actividad de quienes imparten justicia ha venido a ser más importante y necesaria, dado que en 2015 la Corte Interamericana de Derechos Humanos determinó que todos los jueces deben ejercer control de convencionalidad y de constitucionalidad de manera oficiosa.
Indicó que aunque no es un tema nuevo --en 1998 México reconoció la jurisdicción contenciosa de la corte interamericana-- fue hasta 2009 con la sentencia del caso Rosendo Radilla Pacheco cuando se empieza a tomar con más seriedad.
En 2011, recordó, se aprobó la reforma constitucional en materia de derechos humanos y a partir de ella se comenzó a subrayar la importancia de ejercer procesos de control de constitucionalidad y de convencionalidad y que los jueces incorporaran herramientas para la redacción de sus sentencias.
Relató que la Nación mexicana firmó la Convención Americana sobre Derechos Humanos el 3 de febrero de 1981 y 17 años después el país reconoció el poder de resolver de la corte interamericana y la fuerza de sus sentencias.
Osorio Rosado señaló que nuestro país ha sido condenado en algunas sentencias, y las debe acatar porque reconoció la jurisdicción de ese tribunal. *
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